Labio que en mi labio tu vino vertiste
cuando el rojo beso del amor me diste,
¡qué triste dejaste mi vida! ¡Qué triste!
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Mano que en mi frente tu albura posaste,
cuando tu caricia de amor me brindaste,
¡qué triste, qué triste, mi vida dejaste!
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Pupila, que el ala de luz encendida
pusiste en la noche del alma dormida,
¡qué triste, qué triste, dejaste mi vida!
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Hoy sólo el recuerdo me ampara y escuda,
mi escala está rota, mi alondra está muda,
y es fiel y es eterna mi amada:... ¡La Duda!
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Federico Bermúdez y Ortega
cuando el rojo beso del amor me diste,
¡qué triste dejaste mi vida! ¡Qué triste!
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Mano que en mi frente tu albura posaste,
cuando tu caricia de amor me brindaste,
¡qué triste, qué triste, mi vida dejaste!
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Pupila, que el ala de luz encendida
pusiste en la noche del alma dormida,
¡qué triste, qué triste, dejaste mi vida!
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Hoy sólo el recuerdo me ampara y escuda,
mi escala está rota, mi alondra está muda,
y es fiel y es eterna mi amada:... ¡La Duda!
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Federico Bermúdez y Ortega
Reseña biográfica
Nació en San Pedro de Macorís, República Dominicana. Siendo aún muy joven, comenzó a escribir versos. Más tarde colaboró en las revistas literarias más importantes de su tiempo, como "La Cuna de América", "Renacimiento" y "Letras". Llegó a dirigir en su ciudad natal la revista "Mireya".
Quizás la colección más conocida, aunque no necesariamente más la importante, de su creación literaria, sea "Los Humildes" (1916), dada su inclinación a favorecer siempre a los pobres y los más destituidos en la sociedad en que le tocó vivir. Alcanzó el encomio de la crítica. Publicó también: "Oro Virgen", (1910); "Las Liras del Silencio", (1923) y otras. En "Oro Virgen" y en "Líricas del Silencio", nos encontramos frente a un Bermúdez de tono, forma y contenido esencialmente modernista.
Murió en la misma ciudad que lo vio nacer, San Pedro de Macorís (1884 – 1921)
Nació en San Pedro de Macorís, República Dominicana. Siendo aún muy joven, comenzó a escribir versos. Más tarde colaboró en las revistas literarias más importantes de su tiempo, como "La Cuna de América", "Renacimiento" y "Letras". Llegó a dirigir en su ciudad natal la revista "Mireya".
Quizás la colección más conocida, aunque no necesariamente más la importante, de su creación literaria, sea "Los Humildes" (1916), dada su inclinación a favorecer siempre a los pobres y los más destituidos en la sociedad en que le tocó vivir. Alcanzó el encomio de la crítica. Publicó también: "Oro Virgen", (1910); "Las Liras del Silencio", (1923) y otras. En "Oro Virgen" y en "Líricas del Silencio", nos encontramos frente a un Bermúdez de tono, forma y contenido esencialmente modernista.
Murió en la misma ciudad que lo vio nacer, San Pedro de Macorís (1884 – 1921)