En
una casa campesina había
una
doncella que tenía
los
diecisiete años de amor, y era tan bella
que
decían de ella:
«Es
una moza como un sol».
Ella
bien sabía
el
parentesco que con él tenía:
porque
cada mañana,
de
par en par abierta la ventana,
con
su fuego ambarino y mañanero
le
llenaba su cuarto por entero,
y
ella, toda desnuda, con delicia,
se
entregaba al fulgor de su caricia.
De
tanto darse a estas tan dulces mañas,
el
sol se le quedaba en las entrañas
y
bien pronto sentía
un
ardor que en su seno se movía.
«Adiós
los míos y mi casa amada:
me voy
al mundo, por la luz preñada».
Abandonada
y sin hogar
por
la comarca comenzó a vagar.
Alegre
como un pájaro volando,
iba
sola cantando:
«Yo
me soy la alborada,
pues
llevo dentro el sol y soy rosada,
mis
cabellos rojean,
mis
ojos centellean,
mis
labios bermejean,
llevo
en frente y mejillas su color
y en
el pecho su ardor:
toda
yo soy claror contra claror».
La
gente que la oía
se
paraba admirada y la seguía:
la
seguía por el llano y la montaña
para
escucharle su canción extraña,
que
poco a poco la iba embelleciendo.
Que
su hermosura era cabal sintiendo,
dijo:
«Mi hora ha llegado».
No
canto más y, hallándola a su lado,
entró
en una cabaña que allí había.
La
gente que en aquel entorno estaba
sólo
veía un resplandor y oía
los
gritos de dolor que ella lanzaba.
Las
grietas de la puerta, de repente
lucieron
como estrellas fuertemente.
En
seguida se alzó una llamarada,
toda
la gente huyó de allí aterrada,
y en
la gran soledad sólo quedaba
un
niño igual que el sol, que caminaba
y
decía, subiendo por la sierra:
«Vengo
a juntar al cielo con la tierra...»
____
Joan
Maragall
Reseña biográfica
Poeta, ensayista y
traductor español nacido en Barcelona en 1860.
Perteneciente a una
familia de sólida posición económica, rechazó el interés de su padre por
involucrarlo en los negocios, para licenciarse en Derecho por la Universidad de
Barcelona en 1884. A
partir de 1892 desarrolló una intensa actividad literaria participando como
columnista de importantes diarios, traduciendo grandes autores, ocupando la
presidencia del Ateneo Barcelonés, y obteniendo galardones importantes como los
Juegos Florales de Barcelona, Maestro en Gai Saber y el premio Fastenrath en
1910. Fue además miembro fundador de la Sección Filológica
del Instituto de Estudios Catalanes.
Entre sus obras
destacadas se encuentran, "Oda a Espanya" 1898, "Visions i
Cants" 1900, "L'Elogi de la paraula" 1903, "El Comte
Arnau" 1909, "Enllà" 1906, "Oda nova a Barcelona y Cant
espiritual" 1910 y "Seqüèncie" en 1911.
Falleció en
Barcelona en diciembre de 1911.