miércoles, 7 de noviembre de 2012

Insolada



En una casa campesina había
una doncella que tenía
los diecisiete años de amor, y era tan bella
que decían de ella:
«Es una moza como un sol».
Ella bien sabía
el parentesco que con él tenía:
porque cada mañana,
de par en par abierta la ventana,
con su fuego ambarino y mañanero
le llenaba su cuarto por entero,
y ella, toda desnuda, con delicia,
se entregaba al fulgor de su caricia.
De tanto darse a estas tan dulces mañas,
el sol se le quedaba en las entrañas
y bien pronto sentía
un ardor que en su seno se movía.
«Adiós los míos y mi casa amada:
me voy al mundo, por la luz preñada».
Abandonada y sin hogar
por la comarca comenzó a vagar.
Alegre como un pájaro volando,
iba sola cantando:
«Yo me soy la alborada,
pues llevo dentro el sol y soy rosada,
mis cabellos rojean,
mis ojos centellean,
mis labios bermejean,
llevo en frente y mejillas su color
y en el pecho su ardor:
toda yo soy claror contra claror».
La gente que la oía
se paraba admirada y la seguía:
la seguía por el llano y la montaña
para escucharle su canción extraña,
que poco a poco la iba embelleciendo.
Que su hermosura era cabal sintiendo,
dijo: «Mi hora ha llegado».
No canto más y, hallándola a su lado,
entró en una cabaña que allí había.
La gente que en aquel entorno estaba
sólo veía un resplandor y oía
los gritos de dolor que ella lanzaba.
Las grietas de la puerta, de repente
lucieron como estrellas fuertemente.
En seguida se alzó una llamarada,
toda la gente huyó de allí aterrada,
y en la gran soledad sólo quedaba
un niño igual que el sol, que caminaba
y decía, subiendo por la sierra:
«Vengo a juntar al cielo con la tierra...»

____

Joan Maragall



Reseña biográfica

Poeta, ensayista y traductor español nacido en Barcelona en 1860.
Perteneciente a una familia de sólida posición económica, rechazó el interés de su padre por involucrarlo en los negocios, para licenciarse en Derecho por la Universidad de Barcelona en 1884. A partir de 1892 desarrolló una intensa actividad literaria participando como columnista de importantes diarios, traduciendo grandes autores, ocupando la presidencia del Ateneo Barcelonés, y obteniendo galardones importantes como los Juegos Florales de Barcelona, Maestro en Gai Saber y el premio Fastenrath en 1910. Fue además miembro fundador de la Sección Filológica del Instituto de Estudios Catalanes.
Entre sus obras destacadas se encuentran, "Oda a Espanya" 1898, "Visions i Cants" 1900, "L'Elogi de la paraula" 1903, "El Comte Arnau" 1909, "Enllà" 1906, "Oda nova a Barcelona y Cant espiritual" 1910 y "Seqüèncie" en 1911.
Falleció en Barcelona en diciembre de 1911.