Señor,
yo no soy digna siquiera de rogarte:
mi
corazón ignora la palabra del arte.
Sólo
vengo a decirte que no me han comprendido,
porque
los hombres hablan con el orgullo herido.
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Cubren
con bellas frases su más vulgar deseo,
que a
veces me turbaron, pero que ya no creo.
Sin
embargo, a los dos me di con alegría.
Lo
comprendo, Señor: ¡toda la culpa es mía!
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En
los brazos de uno me entregué plenamente,
y en
los del otro... ¿Sabes lo que una mujer siente?
Pregúntale
a la Virgen ,
cuando ella era mujer,
todo
lo que nosotras llegamos a querer.
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Perdóname
la audacia, pero aquella María,
no
supo del abrazo viril que me rendía.
No
miró aquellos ojos fijos en mi hermosura,
como
dedos ardientes sobre mi carne impura.
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Y no
tembló aquel canto de amor en sus oídos
que
pudo abrir en músicas la flor de mis sentidos.
Tú
también sabes que el hombre se acerca a la mujer,
ebrio
por la promesa de su propio placer.
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Pero
la mujer llora, se resiste, Señor,
y
cuando al fin se ofrece, sueña con el amor.
Pues,
mientras en el hombre la vida se hace fuerte,
la
mujer se desmaya con un poco de muerte.
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Quizás
tuve un amante que me sedujo un día,
¡tan
malo que, por eso, me gusta todavía!
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José Ángel Buesa
Reseña biográfica
Poeta cubano nacido en Cienfuegos en 1910 y fallecido en el
exilio, en Santo Domingo cuando tenía 82 años.
Publicó su primer libro de poesías a los 22 años de edad, y
continuó con una producción constante que se difundió ampliamente por todos los
países de habla hispana. Entre sus libros más conocidos, se cuentan «La Fuga de las Horas», «Oasis»,
y «Poeta Enamorado».