Si
muero pronto,
Sin
poder publicar ningún libro,
Sin
ver la cara que tienen mis versos en letras de molde,
Ruego,
si se afligen a causa de esto,
Que no
se aflijan. Si ocurre, era lo justo.
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Aunque
nadie imprima mis versos,
Si
fueron bellos, tendrán hermosura.
Y si
son bellos, serán publicados.
Las
raíces viven soterradas
Pero
las flores al aire libre y a la vista.
Así
tiene que ser y nadie ha de impedirlo.
Si
muero pronto, oigan esto:
No fui
sino un niño que jugaba.
Fui
idólatra como el sol y el agua,
Una
religión que sólo los hombres ignoran.
Fui
feliz porque no pedía nada
Ni
nada busqué.
Y no
encontré nada
Salvo
que la palabra explicación no explica nada.
__
Mi
deseo fue estar al sol o bajo la lluvia.
Al
sol cuando había sol,
Cuando
llovía bajo la lluvia
(Y
nunca de otro modo),
Sentir
calor y frío y viento
Y no
ir más lejos.
__
Quise
una vez, pensé que me amarían.
No me
quisieron.
La
única razón del desamor,
Así
tenía que ser.
__
Me
consolé en el sol y en la lluvia.
__
Me
senté otra vez a la puerta de mi casa.
El
campo, al fin de cuentas, no es tan verde
Para
los que son amados como para los que no lo son.
Sentir
es distraerse.
____
Fernando
Pessoa
Reseña biográfica
Poeta, ensayista y
traductor portugués nacido en Lisboa en 1888.
Es la figura más
representativa de la poesía portuguesa del siglo XX. Sus primeros años
transcurrieron en Ciudad del Cabo mientras su padrastro ocupaba el consulado de
Portugal en Sudáfrica. A los diecisiete
años viajó a Lisboa, donde después de interrumpir estudios de Letras alternó el
trabajo de oficinista con su interés por
la actividad literaria.
La influencia que
en él ejercieron autores como Nietzsche, Milton y Shakespeare, lo llevaron a
traducir parte de sus obras y a producir los primeros poemas en idioma inglés.
Dirigió varias revistas y pronto se
convirtió en el propulsor del surrealismo portugués.
"Mensaje"
fue su primera obra en portugués y única publicada en vida del poeta. Parte de
su obra está representada por los numerosos heterónimos creados durante su
vida, siendo los más importantes Álvaro
de Campos, Ricardo Reis y Alberto Caeiro.
Falleció en Lisboa
en 1935.