Van
forjando al rocío fondo y forma
en la
secreta fragua,
cuando
nadie lo ve, para después
dejarlo
igual que un vaso en la alacena
de la
naturaleza inabarcable,
agua
de pozo limpia y sed al mismo tiempo.
Y
cómo estos principios se combinan
para
pulir, tal piedra de diamante,
el
silencio y la rosa
de
donde nace al fin, como del poro
de la
noche agitada van naciendo
nuestros
sueños más íntimos,
esa
pequeña gota
destilada
en el tallo de cualquier loca avena.
Luego
el sueño también le vence a ella,
y se
evapora, devolviéndole al mundo
su
perfume de rosa y su silencio,
y no
deja más rastro
que
en nosotros la vida, si morimos.
Y por
ello, si fuera dios yo un día,
no
cogería arcilla de la tierra
ni
ninguna otra cosa,
sino
a ti, mi pequeña Galatea
que
en la avena te meces dulcemente,
y
ordenaría al punto: Hágase el hombre
de
esta lágrima pura,
y así
quizá pudiera ser el hombre,
pleno
en su instante único
entre
tan bellas nadas,
más
duradero sueño, una leyenda.
____
Andrés Trapiello
Reseña biográfica
Poeta, novelista y ensayista español nacido en Manzaneda de
Torío, León, en 1953.
En 1975 se trasladó a Madrid para comenzar sus estudios
universitarios, estudios que abandonó para dedicarse por completo al
periodismo. Es colaborador de diferentes publicaciones literarias y director de
la colección de poesía "La
Veleta ".
Ha obtenido importantes premios en el campo de la novela y el
ensayo.
Su obra poética se inició con el poemario «Junto al agua» en
1980, al que siguieron, entre otros, «La vida fácil» en 1985, «Las tradiciones»
en 1991, «Acaso una verdad» en 1993 por el que obtuvo el "Premio Nacional
de la Crítica "
y «Para leer a Leopardi» en 1995.